
Un conductor de León ha sido condenado a pagar 15.000 euros y cumplir nueve meses de prisión por utilizar el carné de conducir de su padre para evadir una multa relacionada con el exceso de velocidad. Esta práctica fraudulenta ha sido común entre ciertos conductores, quienes intentan eludir las sanciones por medio de la identificación de un tercero como conductor del vehículo infractor. En esta ocasión, el Tribunal Supremo ha reafirmado la sentencia tras una denuncia del propio padre del infractor, quien se enteró del engaño y decidió llevarlo ante la Justicia.
El caso se remonta a 2015, cuando el infractor recibió una sanción por superar la velocidad permitida. Para evitar la pérdida de puntos que podría perjudicar su licencia de conducir, optó por registrar a su padre, de 82 años, como el responsable de la infracción. Sin embargo, este intento de manipulación ha tenido graves consecuencias, ya que se considera un delito de falsedad documental. El Tribunal entendió que el comportamiento del conductor no solo dañó la relación familiar, sino que también alteró un documento oficial, constituyendo así una falta grave ante la ley.
A pesar de los intentos del conductor de argumentar que su acción no debía ser penalizada, el Tribunal Supremo rechazó su defensa, señalando que incluir a otra persona para cubrir una infracción es un intento directo de engañar a la administración. Esto resalta la seriedad con la que la la DGT está abordando los intentos de evasión de multas y la identificación del conductor real en casos de infracciones registradas por dispositivos automáticos.
Leave a Reply