Durante un evento de promoción de ‘Mission: Impossible – The Final Reckoning’ en Seúl, Tom Cruise se enfrentó a una pregunta incómoda sobre los impuestos propuestos por el expresidente Donald Trump que podrían afectar la industria cinematográfica estadounidense. Al ser consultado acerca de cómo estos aranceles impactarían su trabajo, especialmente considerando que gran parte de sus proyectos se producen en el extranjero, Cruise prefirió redirigir la conversación hacia su película.
La cuestión de los aranceles de Trump ha estado en el aire, ya que el expresidente sugirió la implementación de impuestos del 100% sobre las películas producidas fuera de EE.UU. Cruise, tras un momento de vacilación, instó a los asistentes a centrar sus preguntas en el filme en lugar de la política, lo que dejó a muchos preguntándose sobre las posibles repercusiones de estos aranceles en su carrera y en la industria cinematográfica en general.
Aunque no se han definido políticas específicas sobre estos aranceles, la administración Trump ha expresado su intención de proteger la producción de películas en Estados Unidos. Esto podría tener un efecto adverso en Cruise, quien ha trabajado en numerosas producciones en el Reino Unido y otros lugares internacionales. A medida que Hollywood enfrenta estos desafíos, el futuro de la producción cinematográfica en el país está en la cuerda floja.
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