El 8 de mayo de 2025, tras la elección del nuevo Papa, León XIV, la presentadora ecuatoriana Mariela Viteri hizo una declaración que generó revuelo. Afirmó que la madre del pontífice, Mildred Martínez, era ecuatoriana y originaria de Chone, Manabí. Esta afirmación se propagó rápidamente por las redes sociales, provocando una ola de comentarios, memes y debates en línea sobre la identidad de la madre del Papa y la veracidad de las declaraciones de Viteri.
Sin embargo, la afirmación de Viteri fue rápidamente desmentida por registros históricos que indican que Mildred Martínez nació en Chicago, Illinois, en 1911. La familia Martínez-Baquié tiene raíces mixtas, y su origen se encuentra principalmente en los Estados Unidos. Este error ha suscitado interrogantes sobre la responsabilidad de las figuras públicas al realizar declaraciones sin la debida verificación de hechos, especialmente en un momento en que la información se comparte rápidamente en el entorno digital.
La controversia ha resaltado el poder y el peligro de las redes sociales, donde una frase mal fundamentada puede generar confusiones masivas. Viteri, al ser una figura influyente, ha quedado en el centro de las críticas, mientras los seguidores y detractores reflexionan sobre la importancia de la precisión en las declaraciones, especialmente cuando se trata de personalidades de alta relevancia como el Papa. En última instancia, esta situación subraya las serias implicaciones que conlleva tener una voz pública en la actualidad.
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